Los sobres de papel kraft son un must para enviar cualquier invitación de boda. Sin embargo, el formato de las invitaciones aún no queda tan claro. Las ideas son muchas y hemos seleccionado alguna de las mejores para ayudarte en la preparación de tu boda.
La invitación multimedia
El funcionamiento es simple. A tus invitados les llega un misterioso sobre de papel junto con una URL y una clave de acceso. Esta url da acceso a un vídeo privado en Vimeo o a una página web en la que se presenta la boda y se cuentan todos los detalles de la celebración.
Ya hay agencias especializadas en grabar a buen precio este tipo de vídeos incluyendo tomas con drones y un montaje cuidado y totalmente profesional. Es una forma de asegurarse el impacto aunque hay gente a la que le puede resultar un tanto paródico. Cuestión de gustos.
La invitación personalizada
Es la más barata y, probablemente, la que más esfuerzo requiere. Escribe a mano o en máquina de escribir si quieres darle un toque vintage las invitaciones a cada uno de los invitados junto a tu pareja. Rememora cómo os conocisteis o cuando introdujisteis a vuestra pareja en su vida, dile lo que han significado para ti y por qué queréis que os acompañen en este día tan especial. Dedicarle ese tiempo a cada invitado hará que se sientan más valiosos y sean conscientes de lo importantes que han sido en vuestra vida así como vuestra intención de seguir contando con ellos en el futuro.
La invitación de diseño
Contrata a un diseñador gráfico y crea tu propio emblema de boda, elige una tipografía para la misma, para los menús o la distribución de las mesas. Crea unos colores corporativos y síguelos para todo lo relacionado con vuestro matrimonio. No importa que sea algo más tradicional como el blanco y el oro o algo más moderno como la combinación de lila o verde, elije algo con lo que os sintáis identificados como los colores favoritos de cada contrayente. Mantente abierto a las ideas del diseñador y convierte tu invitación de boda en algo único y, sobre todo, a la vanguardia que deje anonadados a los invitados.
La invitación tradicional
Al más puro estilo de los recordatorios de las comuniones. En cualquier reprografía tienen múltiples modelos de invitaciones de boda de toda la vida. Blanco y oro o blanco y plata, contará con letra barroca y unos muñequitos que os representarán. No tiene por qué quedar antiguo, si por ejemplo vas a celebrar una boda gay o lésbica o, simplemente, por el rito civil optar por una invitación tradicional le añadirá dinamismo y terminará siendo mucho más moderna que la invitación de diseño.
Finalmente, no podemos obviar la posibilidad de elegir un tipo de invitación en función de la persona invitada y enviar una tradicional a las personas más mayores ya que es probable, por ejemplo, que no sepan poner en marcha la invitación multimedia o añadir una personalizada a aquellas personas que sean más importantes en nuestra vida para hacer hincapié en lo mucho que las necesitamos.
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